martes, 10 de febrero de 2009

Capitulo 2 .- Con nombre y apellido

8/09/07

Hoy fue el día, que día más lindo, de verdad que es como de un maldito cuento.
Junto a dos amigas esperaba a que llegará, muy anciosa afuera del parque. Mi cabello estaba alisado, usaba mis jeans pitillos, mis zapatillas vans , y un polerón café que me presto la shumi (una de mis amigas). De pronto aparece él, con su rubio cabello , que estaba corto esta vez, su gran sonrisa y unos pantalones cafes junto a una polera blanca. Mis amigas desaparecieron en un dos por tres, como lo habiamos planiado, y de pronto el de atras suyo saca un lindo ramo de flores y me lo entrega y no basta con eso, si no que me pagó la entrada al parque. Caminamos por todo el parque hasta llegar a una pequeña laguna. Nos sentamos en un pato al lado de la linda laguna y abrazados mirabamos el cielo y conversabamos sobre muchas cosas. Pasaban las horas, y ya eran más o menos las seis de la tarde, y mis amigas me llamaron ya que debiamos ir a un bingo en el colegio. Yo muy apurada me paré y le dije que debia irme , y de pronto el toma mi mano y me dice que espere un momento , y en eso de su bolsillo saca una baraja de cartas.
-" Te acuerdas que te dije que hacia magia?" - me dijo - " Si, por supuesto que me acuerdo" - le asentí - "pues bueno, escogé una carta pero no la mires" - lo hice- "ahora cierra los ojos y por nada del mundo los abras" - y en eso me da un beso, un beso muy tierno, el más lindo de mi corta vida y después de eso me pidio que diera vuelta la carta, y en ella decia si es que queria pololear con él, y por supuesto que le dije que si!, como resistirme a esa ternura?.
Al rato después me junte con mis amigas, y bueno me despedí de él y nos fuimos al colegio. Obvio que les conté todo, y apesar de lo lindo que fue, y toda la emoción, no estoy muy segura de haber dicho lo correcto, pero bueno no pensar en estupideces ahora.
Cuando llegamos al colegio, no sé porque todo el colegio ya estaba enterado, y por supuesto entre esos todos estaba el alvaro, quien las pocas miradas que hizo hacia mi, no decian nada más que de odio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario